La propagandapopulista ha encontrado el guión perfecto
para encandilar a una sociedad asfixiada por la crisis e irritada, cabreada ,
enojada, exasperada, exacerbada, encorajinada, airada…por tanta corrupción.
El
relato de mi pan empobrecido por el egoísmo de unas élites sin escrúpulos, que
han aplicado dolorosas, lamentables recetas de ajuste mientras escanciaban los
arcones del bien común.
El
maniqueísmo funciona en momentos de angustia colectiva.
En
este clima de inseguridad los encantadores de serpientes han tocado en su
flauta mágica la sencilla melodía del bien y del mal.
¿No
seráque se está preparando enarbolar,
emplear la utopía de la que hablaban nuestros clásicos?
¿No
será que este estatus de iluminados se va a deber a que el orden vigente está
perdiendo todas aquellas constantes vitales que nos habíamos dado allá por el
78?
¿Para
qué hay instituciones que deben estar velando su correcta ejecución en todos
los órdenes y no llegar a lo que estamos llegando?
¿Por
qué han sido colapsadas?
¿Se
quiere escindir todo?
¿Quieren
dar un puñetazo rompiendo lo práctico y pragmático que teníamos?
Nada
de renuncias, nada de limitaciones, nada de razón y juicio, nada de sentido
común…
¿Dónde
vais en avalancha
Nos
pregonan que el juego tampoco no ha cambiado de reglas y que la dinámica
propuesta transformadora, creemos que encubre una gran ambición, que no es otra
que el asalto a las instituciones para descomponerlas y desconectarlas. ¡Peor,
nunca!
Están
engañando: aquí hay una seductora dialéctica con apariencias de renovación y no
hay nada de eso. Porque lo que se necesita es un estado de meliorizaciónen todo lo que se ha mal y poner remedio sin tardanza y
sin miedos.
Cuidado
con los que vienen vestidos de corderos que serán tan falibles como estos y
aquellos cuando palpen el poder.
Aquí
no hay salvadores vestidos de tal forma y de tales ideologías, pues la caja no
da “pa más”
¡Cuidado
de los responsablesde las teles que les
están haciendo sus labores gratis: la 5 y la 4 y la 6. ¿Observan sus tics
totalitarios soterrando las libertades?
Cuanto
antes presenten sus programas, se estudiarán sus proyectos que no son nada
explícitos.
Se
avecinan peligros, contingencias, espadas de Damocles sobre esta sociedad, aún
débil, sobre todo en los servicios sociales básicos, pues las reservas no dan
más leche..
Necesita
la sociedad sentido común, una mollera bien amueblada para queunos y otros no puedan engañarnos. Apagón de
estas televisiones que les sirven gratis de plataforma para lanzar todos los
dicterios posibles.
¿Dónde
están los filósofos y los intelectuales de antaño? Callan, excepto algunos.
¿Dónde están los economistas de campanillas? ¿Dónde están los empresarios
comprometidos con la renovación y altas tecnologías para salir de la crisis?
Todos nosotros, que somos los que votamos, pongamos a gran velocidad el
auténtico sentido común y seamos consecuentes con lo que hacemos y lo que
debamos hacer para bien de la Sociedadbiencomún.
El
gobernante correcto no llega a imponer su estado de ánimo en los contrarios.
Pero el único modo de combatir las tropelías descaradas es restablecer con mano
firme un orden en todos los niveles justó; y que más pronto que tarde se vayan
restituyendo a la sociedadbiencomún los bienes que ha sido estafados, duro a
duro, para mejorar la auténtica sociedad del bien común.. Si no hay unión,
consenso de las conciencias pensantes y bien ajustadas y acordes en la justicia
no llegaremos a ninguna parte.
Hay
que crear una nueva democracia con sus prístinos valores; en el convencimiento
de la unión de voluntades: de orden, de verdad, de transparencia, de
inteligencia y de sentir el bien común,¡ qué difícil lo vemos y lo tenemos.
Pero hay que despejar el lastre que esta sociedad arrastra.
Los
ciudadanosespañoles estamos
mayoritariamente y legítimamente orgullosos de nuestros Ejércitos y con los
hombres y mujeres que los componen, con el Jefe, Felipe VI a la cabeza.
Es
imprescindible cuidarlos, mimarlos, proveerlos, … porque así defenderemos
nuestra libertad y nuestra democracia en la España del siglo XXI.
Todos
nuestros médicos y demás facultativos merecen nuestros agradecimientos sin
reserva alguna ante la epidemia del Ébola; y además, han hecho progresar la
medicina gracias a su trabajo y su generosidad, aún a riesgo de sus propias
comodidades. Los tenemos en esta crisis tan cacareada por tantos plumillas y contertulios
tan dados a hablar de sin conocer de lo que hablar y enjuician.¡ Se falta
tantas veces a la auténtica verdad ¡
Es
verdad que en nuestra Patria, España, se pueden cometer muchos fallos y puede
que se hayan cometidos fallos, pero se puede mejorar lo insuperable, porque
tenemos médicos, enfermeros y auxiliares que derrochan positividad y
competitividad que es señal que nuestro futuro será meliorizante para todos
nosotros y para la Nación..
Son
ejemplares por su comportamiento, por lo cual estamos obligados a ser
agradecidos con todos ellos.
Todos
ellos están entregados a su profesión y a su compromiso con los ciudadanosen su servicio.
Buen
ejemplo son todos los médicos que me van tratando en cuantas crisis he tenido
desde hace ya diez años, el 15 de Diciembre, que me diera el primer infarto; el
segundo en una piscina con el consabido ahogamiento y las urgencias pertinentes
y cuidados en la UCI
de Úbeda.¡Cómo me atendió el Jefe de la misma! No digamosen los sucesivos ictus que me han sacado adelante
los equipos de neurocirugía, cardiología, hematología, nefrología y todos los
auxiliares de enfermería. Gracias a todos por su entrega y empatía, humanidad y
generosidad. Algún día pondremos sus nombres. Su trabajo es silencioso y muy
competitivo…
En
un mundo como el nuestro, en el que se habla mucho de valores pero se cultivan
poco; todos estos personajes tanto esos misioneros, médicos yenfermeras, capaces de dar la vida para
mejorar la de los demás, los otros. Tienen gran preocupación por los OTROS.
Estamos
viendo que estos voluntarios que están tratando el Ébola en el Hospital San
Carlos de la Comunidad
de Madrid sí saben salvar a la enfermera que trató libremente a los
misioneros., tan denostados por esa sociedad egoísta y sin humanidad posible.
Tengamos un poco, aunque sea un poco de humanidad. ¡Somos del género humano!
Que
dejen los tertulianos de manejar términos que no dominan. Que dejen hablar a
los Doctores preparados para esta situacióny que no pase como en la tertulia de la tarde de la
Cadena I de TVE, T con T, que ellos han
gritado, apropiándose todo el tiempo del espacio y no dejando explicarse al
Catedrático de la
Complutense. ¡Qué pena!¡Ellos saben más que el especialista que estaba invitado! Así somos,
nadie piensa en los demás. Hay que saber escuchar, señores tertulianos, pues el
público está ya harto de tan poco respeto a los televidentes..